Contra reloj

Contra reloj

Por: Ana Lilia Herrera

Dijeron que “primero los pobres”, pero ignoraron durante todo el sexenio a los que no votan y que aún no pueden valerse por sí mismos: a las niñas, niños y adolescentes que, en México, tienen una prevalencia de pobreza 8.3 por ciento superior, al nivel de la población en general.

A unos días de la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2024 –el último de esta administración–, UNICEF México en coordinación con las comisiones de Derechos de la Niñez y la Adolescencia, Presupuesto y Cuenta Pública y Educación de la Cámara de Diputados, presentamos el Análisis de la Inversión Pública en Infancia y Adolescencia en México 2012-2024.

El periodo de estudio comienza en 2012, cuando se desarrolló por vez primera el Anexo Transversal 18: “Recursos para la atención de niñas, niños y adolescentes”, en cumplimiento al mandato de la Convención sobre los Derechos del Niño y de las reformas a la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que obligaron al Estado mexicano a elaborar nueve Anexos Transversales, así como a publicar sus respectivas metodologías, factores, variables y las fórmulas utilizadas en su elaboración.

Los hallazgos de este análisis son un fuerte llamado de atención sobre la deuda que tiene el Estado con la niñez y la adolescencia mexicanas y una sacudida para dejar de aprobar presupuestos inerciales. ¿O de qué sirve tener un apartado en el PEF clasificado por grupo etario (2018) y con una metodología publicada en 2022, si las políticas públicas como las Estancias Infantiles, las Escuelas de Tiempo Completo o el gasto en salud pueden bajar o desaparecer a capricho?

Uno de los mayores retrocesos en este sexenio, está en el sector educativo. Acceder a una educación de “excelencia” como propuso el obradorismo, no es una meta que se agote con la simple cobertura, que por cierto tampoco ha aumentado. El rezago educativo, que se logró reducir a 8% en 2014, se ubicó en 10.2% en 2022, tras la pandemia por Covid 19 y el largo cierre de escuelas; falta medir la eliminación de recursos para capacitar y actualizar al magisterio y el robo de contenidos como matemáticas y lectoescritura en el nuevo modelo educativo.

En salud, México pasó de 2.6% en 2016 del gasto total, al 1.4% en 2023. Claramente, la implementación del ya extinto Insabi, fue desastrosa para la salud de la niñez y la adolescencia, a grado tal que hoy solo uno de cada cuatro menores, tienen completo su esquema básico de vacunación.

Las niñas, niños y adolescentes son el grupo etario al que menos ha beneficiado la política social de este gobierno: de 2012 a 2023, en la población en general la cobertura de protección social pasó de 39% a 56%; sin embargo, en el caso de las y los menores de 17 años, bajó a 0.7% de 2.6 por ciento.

En el periodo de estudio, el Anexo 18 ha sido testigo de recortes al programa de leche Liconsa, y a los recursos del Ramo 33 que se utilizaban para los desayunos escolares de los DIF estatales, que han venido a menos.

Hay muchas faltas más del Estado mexicano, pero este primer ejercicio de análisis, representa la oportunidad de visibilizarlas y atenderlas, empezando por el gobierno federal, que deberá mejorar los mecanismos de transparencia, acceso a la información y rendición de cuentas, para facilitar el análisis del PEF y evitar lo que ocurre hoy: recursos sin etiquetar y en una sola bolsa, que solo favorece la discrecionalidad y evita evaluar, corregir y mejorar la inversión en niñez y adolescencia.

Estamos contra reloj, pero las oportunidades están a la vista. Las y los diputados tenemos la oportunidad de defender los recursos para el bienestar de nuestras niñas, niños y adolescentes, su futuro se construye hoy.

Fuente: eluniversal.com.mx

70 años del voto de las mujeres mexicanas y el país que nosotras queremos

70 años del voto de las mujeres mexicanas y el país que nosotras queremos

Por: Claudia Castello

El pasado 17 de octubre se conmemoraron los 70 años del reconocimiento del derecho a votar y ser electas a las mujereres de nuestro país, en este marco el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en conjunto con las organizaciones feministas agrupadas en “Todas México”, lo celebramos con un evento en Iztapalapa, Ciudad en México, en el cual la Secretaria de Igualdad de Géneros del partido, Karen Quiroga Anguiano, convocó a más de tres mil ciudadanas para entregarle la agenda “El México que queremos las mujeres” a Xóchitl Gálvez.

Es importante resaltar que esta Agenda política, legislativa y de gobierno, fue construida por más de 80 organizaciones a lo largo y ancho del país en foros regionales realizados en las ciudades de Monterrey, Tijuana, Chiapas, Cuernavaca, Durango, Morelia, Aguascalientes, San Cristóbal de las Casas, Mérida y la Ciudad de México. En ellos, activistas y defensoras de derechos humanos compartieron sus preocupaciones, demandas y aspiraciones para que las mujeres logremos vivir, por fin, en un México libre de violencia y en la garantía del ejercicio pleno de nuestra ciudadanía, y con ella, de todos nuestros derechos humanos.

Esta agenda fue presentada públicamente el pasado ocho de septiembre, el Día Internacional de la Ciudadanía de las Mujeres, en la Casona de Xicoténcatl, la antigua sede del Senado de la república, como un posicionamiento firme y claro de las organizaciones feministas agrupadas en “Todas México” rumbo al proceso electoral del 2024. Pero en el evento de Iztapalapa organizado por el PRD, en un gesto simbólico, las feministas le colocaron la banda “sufragista” y le entregaron la Agenda a Xóchitl Gálvez Ruíz, quien protestó hacerla cumplir. Este hecho cobra una dimensión políticamente significativa, pues Xóchitl es la encargada de construir el polo opositor que el próximo año disputará la presidencia de la república al partido oficial, Morena.

Así como hace 70 años el objetivo era conquistar nuestra calidad de ciudadanas, hoy día lo que exigimos es la paridad total en los cargos de representación política, sin simulaciones, el cumplimiento de “la 3 de 3 contra la violencia”, eliminar la desigualdad laboral y económica, así como la erradicación de todas las violencias que padecemos las mujeres y las niñas, y la implementación del sistema nacional de cuidados, entre muchas otras propuestas para avanzar hacia la construcción del México que queremos las mujeres.

Es importante señalar que, así como muchas organizaciones feministas han luchado durante muchos años, el PRD tiene décadas trabajando en el reconocimiento y ejercicio de todos los derechos humanos de las mujeres. Este compromiso nos llevó a declarar al PRD como un partido feminista en nuestro Congreso Nacional del año 2021, lo cual se tradujo en modificaciones a nuestra normativa interna. Por ello, no dudamos en hacer nuestra esta Agenda y ser la puerta de entrada para que nuestra coordinadora nacional del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, una mujer progresista, la recibiera y asumiera como suyas y como una prioridad, las causas más urgentes de las mujeres de México.

Levantando la mirada para ver con perspectiva histórica lo alcanzado por las mujeres durante estos 70 años, los logros han sido significativos, tanto que hoy, estamos ante la ineludible alternativa de llevar a una mujer a la presidencia de la república; debemos reconocerlo y felicitarnos por ello, ya que estos avances no han sido ninguna concesión, por el contrario, han sido el resultado del trabajo de miles y miles de mexicanas de todas partes del país durante décadas. Por ello, este evento en el cual coincidieron felizmente las organizaciones agrupadas en “Todas México”, el PRD y la coordinadora del Frente Amplio por México, Xóchitl Gálvez, es un excelente augurio de que mejores tiempos están por venir para todas las mujeres de México, y así será, porque de eso nos encargamos TODAS.

Fuente: etcetera.com.mx

70 años del voto de las mujeres en México

70 años del voto de las mujeres en México

Por: Carla Humphrey

Referirnos al derecho de las mujeres a votar y ser votadas fue apenas un paso en el largo camino que se ha tenido que recorrer para empezar a visibilizarnos a pesar de múltiples obstáculos, retrocesos y bajo un estado patriarcal en el que impera una cultura machista que se resiste a desaparecer.

La larga lucha por alcanzar la igualdad de derechos respecto a los hombres en México marca sus primeros antecedentes en 1916 en aquel Congreso Feminista en Mérida Yucatán, en el que se reflexionó justamente sobre los derechos que les permitieran a las mujeres tomar el papel que hoy se nos reconoce en la sociedad mexicana. En 1922 es reconocido en dicha entidad el derecho de las mujeres a participar en elecciones municipales, siendo Rosa Torre González elegida como regidora en Mérida, lo que la convirtió en la primera mujer en desempeñar dicho cargo en México.

En 1934 se presentó una iniciativa de reforma constitucional que otorgó a la mujer el derecho a votar y poder lograr un cargo de elección popular, pero al no realizarse el proceso legislativo de la declaratoria correspondiente, esta iniciativa no se materializó. Fue hasta 1953 que el entonces Presidente de la República, Adolfo Ruiz Cortines, expidió la reforma al 34 de la Constitución en la que se otorgó plenitud de derechos ciudadanos a las mujeres.

Así, el 17 de octubre de 1953 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el decreto que reconoció el derecho de las mujeres a votar y ser votadas para puestos de elección popular. A nivel federal, fue hasta 1955 cuando las mujeres pudieron ejercer este derecho político.

En 1996 se incluyó en la ley electoral la recomendación para que las candidaturas a diputaciones no excedieran el 70% de un mismo género; para 2008 se estableció que las candidaturas de mujeres debían ser al menos del 40%.

En 2014 se incorpora el principio de paridad de género en la Constitución, estableciendo que los partidos debían postular paritariamente sus candidaturas para el Congreso de la Unión y los Congresos estatales. Esto permitió que en 2018 casi se alcanzara la paridad en el Senado y en 2021, se lograra en la Cámara de Diputados.

Otro avance importante se logra en 2019, año en el que se aprueba la reforma conocida como “Paridad en Todo” que estableció la obligatoriedad de garantizar el cumplimiento de la paridad de género no solo en la postulación de candidaturas, sino también en la integración de los tres poderes de gobierno, en los tres poderes del Estado, órganos autónomos y en los sistemas normativos indígenas.

Para abril de 2020 se logró una reforma que modificó 8 distintas leyes que tiene como objetivo la prevención, atención, sanción, reparación y erradicación de la violencia política contra las mujeres en razón de género.

De acuerdo con el Índice Global de Brecha de Género 2023 que publica el Foro Económico Mundial, tal sólo 5 países han alcanzado la paridad en sus poderes legislativos: MéxicoNicaraguaRuandaEmiratos Árabes Unidos y Nueva Zelanda.

Falta mucho por recorrer para contar con una igualdad sustantiva; hoy los referentes más atrasados en el poder público se encuentran a nivel municipal, en las gubernaturas e, incluso en la Presidencia de la República. No obstante, estoy segura que tarde o temprano alcanzaremos dicha igualdad y honraremos la memoria de muchas mujeres que han luchado por alcanzar el pleno ejercicio de sus derechos fundamentales.

Fuente: eluniversal.com.mx

Los Derechos políticos de las mujeres

Los Derechos políticos de las mujeres

Por: Elsa Cordero

Los derechos humanos de las mujeres y sus garantías reforzadas: participación política y a una vida libre de violencia; ahí abordamos el monitoreo en radio y televisión, el cumplimiento de la pauta y monitoreo en espacios noticiosos, y los derechos humanos de las mujeres en el marco normativo mexicano desde el bloque constitucional y el control de convencionalidad.

Las obligaciones de los partidos políticos para el fortalecimiento de la participación política de las mujeres, destacando la participación política de las mujeres como derecho humano y su alineación con la ENCCÍVICA y sobre los recursos y el gasto programado para la capacitación, promoción y desarrollo del liderazgo político de las mujeres.

En un tercer momento tocó hablar sobre violencia política contra las mujeres en razón de género, analizando la prevención, atención, investigación, sanción de la violencia política contra las mujeres en razón de género, conociendo criterios jurisdiccionales y medios de impugnación para defender la participación política de las mujeres, con el enriquecedor análisis de casos prácticos.

Y finalmente nos capacitaron sobre comunicación electoral, para vislumbrar los retos y oportunidades para potenciar las campañas de las candidatas, identificar a la violencia digital, compartir buenas prácticas y políticas públicas, analizamos las herramientas para la construcción de una estrategia de comunicación y los elementos para un debate.

Tuvimos conferencias magistrales sobre como ir más allá de la igualdad formal, perspectivas actuales de la participación política de las mujeres, dimensionar qué es y cómo identificar la violencia política contra las mujeres en razón de género y conocimos la Guía para Juzgar con Perspectiva de Género en Materia Electoral.

Fue un fin de semana lleno de información, de conocimiento, de crecimiento, y de convivencia con otras mujeres interesadas en aportar y sumar a los objetivos del curso.

Las colectivas del Capítulo Tlaxcala de la Colectiva 50+1 que participamos en el curso, tenemos el compromiso y el ánimo de compartir esta información con nuestras colectivas, en un momento clave como el que vivimos, pues se trata de información de gran utilidad que nos prepara, no solo para conocer nuestros derechos, sino para ejercerlos y exigirlos.

Por eso durante algunas semanas, con la colaboración que nos permite este importante medio de comunicación, con el probado compromiso que tiene quien lo dirige, con los derechos de las mujeres, estaremos presentando de manera muy sencilla y didáctica, contenidos sobre el curso que recibimos, cumpliendo así con el compromiso que adquirimos al participar en la capacitación, como promotoras entre nuestras compañeras, pero sobretodo con el entusiasmo de compartirlo con todas las mujeres de nuestro estado.

Fuente: redaccion.online

El derecho a ser votadas: 70 aniversario

El derecho a ser votadas: 70 aniversario

Por: Angélica de la Peña

El 17 de octubre de 1953 finalmente se logra que la Constitución Política establezca el derecho de las mujeres a votar y a ser votadas. Hubo que pasar tres sexenios, si tomamos en cuenta que el primer decreto de 1937 no fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, porque el presidente Lázaro Cárdenas, no lo hizo. Se dice se dejó llevar por la grilla de que las mujeres serían manipuladas por la Iglesia Católica al emitir su voto. Intriga misógina, que retrasó esta garantía.

Sin embargo, el solo precepto constitucional no garantizó que las mujeres estuviesen en la boleta electoral en igualdad de condiciones que los hombres. Hubo que promover reformas para obligar, primero a cuotas, y luego concretar la paridad.

La primera reforma para candidaturas paritarias entre mujeres y hombres para los congresos locales y de la Unión fue en 2014 y paridad en todo fue en 2019. Y aún muchos hombres siguen identificando a las mujeres como propias para las tareas domésticas, o para tareas subalternas. Y si de elecciones se trata, ahora que los partidos políticos están obligados a incluir mujeres en un 50%, pues resulta que no hay mujeres competitivas para ocupar esos encargos.

En este aniversario, tenemos otro frente que atender, y tiene que ver con las decisiones que están tomando en el INE y en el TEPJF. En los organismos electorales y jurisdiccionales en materia electoral, siempre hay voces que intentan suavizar las sanciones a los partidos políticos o a funcionarios frente a denuncias por violencia política contra las mujeres, o de otra índole.

Por eso en el marco de esta conmemoración, debemos poner en la mesa las dificultades reales que enfrentan las mujeres al pretender competir o al observar cómo algunos hombres se ufanan de ser violentadores de mujeres o desobligados de alimentos de sus hijos e hijas, y pueden ser candidatos como si nada.

Esto está pasando con la 3 de 3 contra la violencia. Tanto el INE como la Sala Superior del Tribunal Electoral interpretan la Constitución y las leyes no de manera progresiva, como debiera ser por tratarse de derechos humanos de las mujeres. Para los magistrados electorales en el que un señor esté en el tegistro de personas sancionadas por violencia política de género o por no cumplir con los alimentos de su familia, no es suficiente para no ser reelectos o candidatos. Solo procedería, dicen, si son sancionados penalmente.

Esto me lleva a lanzar dudas razonables a las autoridades electorales: al señalarle a un señor que no puede ser candidato porque es un deudor de alimentos, no se le sanciona con una medida penal, no se le priva de la libertad. Lo que se le señala a ese señor es que no puede, no tiene la potestad legal y moral, para representar a la sociedad en un encargo de representación política. Si esa persona está en un proceso judicial que aún no llega a término, eso es otra cosa. Lo que se señala en la 3 de 3 es que no es un ciudadano ejemplar, ha cometido ilícitos. Alertamos es un error, otorgarle a priori, a un violentador o deudor, fuero, para rehuir a la justicia.

Conviene que las autoridades electorales, discutan desde el proceso histórico de los derechos de las mujeres a ser votadas, que tiene que ver también con la vindicación de la política. Por eso la conmemoración del sufragio de las mujeres no puede ser una fiesta. Porque todavía hay pendientes para que haya justicia.

Fuente: elsoldemexico.com.mx